Dra Felisa Victorio Cota

Pérdida de peso 5

28 octubre 2019

Llevaba aproximadamente dos años intentando bajar de peso, pero nada de lo que hacía parecía funcionar. Era muy triste ver qué pese a todo el esfuerzo que hacía, yo continuaba ganando peso, llegando a pesar 76.5 kg. Es finalmente en enero de 2019, cuando gracias a una maravillosa profesional en el área de la salud mental, conecto con la increíble Dra. Felisa Victorio. Al principio tenía mis dudas, había escuchado que los nutriólogos solo te daban dietas estrictas y que el bajar de peso era una real tortura dónde había que pasar hambre. Pero al conocer a la Dra. Felisa me di cuenta que nada de eso era verdad y esos comentarios eran de personas que tristemente habían tenido malas experiencias. Desde el minuto que ingresé a su consultorio me sentí tratada como un ser humano, y no como un expediente más. La calidad y profesionalismo con el que te aborda la Dra. habla de la vocación que tiene por su profesión y empatía que tiene hacía tí como paciente. 7 meses después de haber sido guiada y tratada por está increíble profesional puedo decir que además de haber bajado 21.5 kg, aprendí literalmente a comer. Porque la realidad es que yo no sabía hacerlo. Ahora disfruto de la comida de una manera en que jamás lo había hecho. Asimismo, me ayudó a ver el ejercicio como algo para mejorar mi calidad de vida en lugar de ayudarme a eliminar calorías. Fue un camino largo, había momentos en los que dudaba de si lo lograría, pero el acompañamiento y educación que me ofreció la Dra. lo hizo más fácil. Puedo decir que ahora la ropa no me elige, sino que yo eligo que ponerme. Ya no tengo que usar los pantalones de última talla que encontraba hasta el final de cualquier tienda departamental. Asimismo, disfruto preparar mis alimentos en casa y porque no, si la ocasión lo amerita, disfruto también de una buena rebanada de pizza. Recomiendo totalmente a la Dra. Felisa, que además de una profesional en el área médica y nutricionista, es un ser humano con una calidad humana de otro mundo. Gracias infinitas por ayudarme a ser la mejor versión de mí misma y sobre todo, gracias por enseñarme a comer bien. Ahora lo que soy por dentro también se refleja por fuera.